Tú...
Tú sigues siendo el que ordena lo que siento
desde ese pedestal de las quimeras;
Tú sigues siendo la firme enredadera
que carga con el peso de mis sufrimientos.
Tú sigues siendo, Señor, para el sediento,
la fuente fresca que surge en la pradera;
Tú sigues siendo, Señor, la verdadera
luz ante la oscuridad de pensamientos.
Tú sigues siendo el sol de mis mañanas,
el bálsamo eficaz contra mi llanto.
Tú sigues siendo el bien que siempre gana.
Tú sigues siendo el reflejo del quebranto,
Tú sigues siendo el Señor de santa Ana,
la Esperanza y el Poder del Martes Santo.
Fuente fotografía: el esperanzo
Preciosa la foto, y cuantos recuerdos y muy buenos me tra esta imagen de Roldan de la Plata... grande su Poder siempre... por los siglos de los siglos. Amén...
ResponderEliminarUn abrazo, abuelo... con poder y esperanza
he tenido la suerte de ecibir consejos de afamados costaleros de su paso, y he tenido la suerte de esuchar las palabras sólo a Él dedicadas durante mucho tiempo...hoy otra talla ocupa su lugar en el paso, pero en el corazón, Él sigue ocupando idéntico emplazamiento al de aquellas primeras veces a su lado.
ResponderEliminarUn abrazo