Ana...
Se llama Ana, y la vió nacer la noble ciudad de Guadix, en donde ha transcurrido su vida, a caballo entre Granada, ciudad de sus estudios universitarios, y Almuñécar, rincón en el que ha pasado sus veranos. Ana es risueña, y su pícara sonrisilla, mitad travesura, mitad sinceridad, siempre nos contagia, y es fácil encontrarnos riendo junto a ella, en los pocos momentos que podamos compartir. Ana tiene la proporciones perfectas de bondad y de belleza, la medida justa de atractivo, resaltado en el verde de sus ojos, y hablando con ella enseguida se da uno cuenta de que es especial, como especiales son las rosas en los jardines.
Ana es casera y familiar, y lo que más le gusta en este mundo es una velada en una mesa de camilla, junto a sus hermanas y sobrinos, a los que quiere con locura. Es buena conversadora, amante del buen vino, educada y agradable y es que, como ella dice entre risas "está muy desaprovechada", porque lo mismo sirve para un roto que para un descosido. Ella es esa esencia que se guarda en los frasquitos pequeños, y que en cuanto lo abres, su aroma lo llena todo, con sólo dos gotas que te pongas...dos gotas de diversión, dos gotas de franqueza en todos sus actos, dos gotas de verdadera amistad, dos gotas de plena disponibilidad cuando la necesitas, dos gotas de dulzura, dos gotas de gracia andaluza, y dos gotas de profundos sentimientos.
Ella es, Ana, y en ese nombre tan corto, de apenas tres letras, se guarda un cariño inmedible que, además, entrega a todos los que comparten cosas con ella, y en nombre del cual le estoy hablando hoy, para que el ánimo le suba un poco, en estos días en que el color gris está tiñendo sin permiso su día a día...
Luis es precisosisimo, como todo lo que escribes!! No sé expresarte ahora mismo lo que siento porque me ha pillado por sorpresa, pero si que es verdad que te lo agradezco de corazón, tu apoyo y estas palabras que te hacen derramar suspiros que son mezcla de alegría y de pena a la vez! Alegría por haberos conocido a ti y a "Mari" porque es dificil encontrar a gente en la vida con quien congeniar tan bien y sólo dos días me han hecho falta para quererte, fijate! Para qué más, si en sólo unos instantes te puedes dar cuenta de la que es una buena persona de verdad!! Espero poder darte las gracias en persona y poder compartir contigo uno de esos vinos que tanto nos gustan muy pronto!! Un beso muy fuerte!
ResponderEliminarYo tambíén lo espero, así que te tomo la palabra.
ResponderEliminarUn beso y pa´lante...